Más allá de la brecha salarial: Repensar espacios que nos dividen
##plugins.themes.bootstrap3.article.main##
Resumen
Estos últimos cuatro años han sido para nuestro país una de las etapas parlamentarias donde más se avanzado en la agenda de género, entendiendo a esta como la asignación de políticas públicas, programas y proyectos enfocados hacia la lucha contra la discriminación y a igualar las condiciones para todos y todas; esto se ha conseguido paulatinamente gracias a la gestión de decenas de organizaciones de la sociedad civil y gubernamentales que se han movilizado para retomar y subir a la palestra la discusión sobre derechos sociales, labores y reproductivos en la cámara legislativa; basta mencionar la nueva legislación que regula la despenalización del aborto en tres causales, la asignación de post natal tanto para hombres y mujeres, haciendo más justa la tarea respecto a la crianza y cuidado de los niños y niñas, también el llamado “criterio de paridad de género de 60-40” el cual consistente en una reforma al sistema electoral, donde se fortalecerá la participación de las mujeres en el Congreso Nacional, dando a las mujeres al menos un 40% de las candidaturas al Congreso, y el mismo porcentaje será aplicado para los integrantes de partidos políticos, y a nivel administrativo del gobierno, uno de los hitos con mayor importancia es precisamente la entrada en vigencia del Ministerio de la Mujer y la Equidad de género, el cual se promulgó el año 2016, con el fin de combatir la discriminación de las mujeres y además de promover proyectos y actividades orientadas hacia la igualdad de derechos y la equidad de género; entre sus programas se encuentra fuertemente el área de mujer y trabajo. En conjunto con el programa de Mujer, ciudadanía y participación, se han enfocado hacia la construcción de una participación igualitaria en el ámbito laboral, buscando disminuir la brecha salarial existente.